Toma de contacto con el Moskito.

    A las 23: 30 aproximadamente, del martes 16, tomó tierra el Moskito Valiente. Por supuesto ahí estábamos nosotros, el Serru, (alias Jose y compañero de viaje)  y yo.

   Fue un flechazo, no podía dejar de mirar e investigar cada pequeño recoveco del barco y menos aún dejar de poner la cara de ``flipao´´ que se me pone a mí cuando veo algo nuevo y que me encanta.

   Del barco bajaron Jose y Lourdes, contentísimos de haber llegado aunque fatigados por las intensas horas de navegación que supuso este tramo de aventura. Nos enseñaron todo el barco por dentro, guapísimo. Y ¡nos dejaron elegir camarote! Yo me cogí el de proa, es el más grande y encima en la puerta pone ``captain´´. Jejeje Espero que no sea porque tenga que ser yo el que gobierne. Lo malo es que se mueve mucho más que los de popa, donde hay dos; a estribor el del Serru y a babor el de capitanía de verdad. Serru y yo todavía no nos estamos quedándo en el barco. Ya habrá tiempo.

  Estos días han estado marcados por las largas y amenas charlas entre los tripulantes y un bombardeo de información sobre nuestra queridísima y preciada isla, a la cual sin duda echaremos de menos.

    No hemos tenido tiempo de visitar los rincones más bonitos de Lanzarote, porque queremos reparar todas los pequeños desperfectos causados durante la bajada, (roturita en la vela, poleas que hay que cambiar, puerta que hay que lijar y pintar…) En fin, que hay un montón de trabajillo que queremos hacer antes de dejar el atraque en Pto. Calero para luego fondear en algún rincón de la isla y dedicarnos a enseñarla y a disfrutarla. 

    Con todos estos nuevos planes y siempre dependiendo de las condiciones meteorológicas la fecha de salida se prevé para el sábado.

 Un saludo y hasta la próxima entrada.