sábado, 4 de diciembre de 2010

Rumbo a la Gomera.

 

    El día, viernes 3, se levantó junto a una pequeña brisa. Después de desayunar placidamente en la cubierta del barco, esa brisa se había convertido en un vientito de 20 nudos, demasiado justo para nuestro tenedero. Por lo menos para irnos y dejar sólo al Moskito, peleándose con el viento y las olillas del mar de fondo. Además, las predicciones eran que aumentara el viento, ya que volvemos a estar a la espera de temporal. (Uno detrás de otro).
   Tomamos la decisión de irnos de allí hacia otro sitio más seguro. Las opciones son; Los Gigantes o La Gomera. Se barajan y vemos que es mejor La Gomera. Aunque dejamos algunas cosas pendientes en Tenerife. Tocará volver a hacer la compra e ir al Siam Park, que ya tienen la entrada. Sería una pena perderla.
  La decisión está tomada, estibamos todo y ponemos rumbo a La isla Colombina. A esto ya es la hora de comer. El Serru y yo nos ponemos a hacer una pasta carbonara que con el movimiento del Moskito dudamos de si va a estar buena. Al final sale, y bastante mejor de lo esperado.
  Tras apenas 5 horitas de navegación llegamos al muelle de San Sebastián donde un marinero desganado nos recibe y nos indica el amarre. (Siempre nos toca en la otra punta de los puertos). Una vez en tierra vamos a los baños y nos pegamos una súper ducha, ¡por fin!
    Montamos las bicis plegables que están graciosísimas y nos damos un paseíllo por San Sebastián. Aprovechamos para comprar algo y hacernos una mega cena en el Moskito.
  Hoy, sábado, 04 de diciembre de 2010, aprovecharemos para visitar un poquito esta isla acantilada y llena de curvas. y por la noche: ¡¡ir a Discomera!!
 Un saludo y hasta la próxima entrada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario